José Carlos Mariátegui La Chira (1894-1930), fue un autodidacta, escritor, periodista y teórico político peruano, que sentó las bases de lo que podría llamarse un socialismo marxista peruano, por la presencia de elementos propios del contexto de la época y del ideario mítico andino, configurando así un marxismo heterodoxo, que lo acercaba más a las propuestas bergsonianas y sorelianas, en torno al papel del mito, pero bajo sus propios términos:
«Mariátegui se declaró marxista convicto y confeso. Pero su marxismo…fue –por decir lo menos– excesivamente heterodoxo, fue un marxismo original, sui-generis. Mariátegui bebió principalmente su marxismo a través de los ideólogos italianos –como Labriola– y de los filósofos “idealistas” –como Benedeto Croce–, cuya presentación del materialismo histórico estuvo teñida de una dosis muy elevada de voluntarismo. No se puede desconocer tampoco la influencia de Unamuno, profunda y fruiciosamente comentado por Mariátegui, y cuyo agónico existencialismo se descubre en muchas páginas del Amauta.
Pero quien influyó sobre todo en el pensamiento de Mariátegui fue Georges Sorel, según expresa manifestación de nuestro eminente pensador. “Georges Sorel –remarca– en estudios que separan y distinguen lo que en Marx es esencial y sustantivo, de lo que es formal y contingente, representó en los dos primeros decenios del siglo actual, más acaso que la reacción del sentimiento clasista de los sindicatos, contra la degeneración evolucionista y parlamentaría del socialismo, el retorno a la concepción dinámica y revolucionaria de Marx y su inserción en la nueva realidad intelectual y orgánica. A través de Sorel, el marxismo asimila los elementos y las corrientes posteriores a Marx» (Aguirre Gamio, 1975).
Hoy, en el Perú del Siglo XXI, y bajo una crítica constructiva al socialismo marxista, y en ello, al pensamiento de Mariátegui por estos lares, que frente a las ciencias actuales (en un sentido epistemológico) se nos presenta como desfasado al contexto en curso en diversos capítulos, y ante la pregunta: ¿Queda algo de vigencia en el pensamiento de Mariátegui? La respuesta que corresponde es que no volvamos a Mariátegui (entendido esto como lectura literal y acrítica), sino que lo superemos (lo cual implica revalorar sus ideas, rescatar su pensamiento, desechar las partes caducas y actualizar su propuesta). Que vivifiquemos su espíritu de «Peruanicemos al Perú», que en palabras del filósofo peruano Luis Felipe Alarco, conserva todo su valor como síntesis de lo andino con lo occidental. En ese mismo sentido:
«Uno de los peruanos más universales es, sin duda, José Carlos Mariátegui. Sus Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana han dado la vuelta al mundo y han tenido numerosas reediciones y traducciones. Parte de su vigencia se encuentra en su mirada crítica, en su intento de recoger lo mejor del pensamiento occidental para pensar el mundo andino. Mariátegui no era un repetidor y no buscaba extrapolar teorías. Él quería pensar desde y para el sur, quería comprender el Perú en toda su diversidad y complejidad, por eso introduce en el pensamiento marxista el problema del indio y de la tierra, y distingue entre un nacionalismo de vanguardia y uno conservador. Por eso fue categórico al señalar que el socialismo no debía ser calco ni copia, sino creación heroica» (Tejada, 2019).
Ello consideramos, es la mejor forma de mantener viva su obra y sus contribuciones académicas, que siempre fueron destinadas a la denuncia de injusticias sociales y a la plena comprensión de las relaciones que en el Perú de su época, demandaban suprema atención (ante la indiferencia cómplice de las oligarquías alienadas en torno a la cuestión indígena y el gamonalismo), para la reconstrucción de una identidad, y de un destino propio, de una racionalidad propia, de una forma de pensar netamente peruana.
De pensar al Perú, desde el Perú.
Los jóvenes políticos y científicos sociales peruanos de hoy, deben rescatar su esencia y no solo ir más allá de su pensamiento, sino de los pensamientos importados que en el Perú ya han tenido larga aplicación, en referencia al Liberalismo, al Conservadurismo, al Fascismo y al propio Comunismo (ante estos solo cabe dos posibilidades, burda imitación o creación heroica). Solo así la frase de «Peruanicemos al Perú» y la de «Ni calco ni copia», tendrán sentido en todo su potencial.
Referencias bibliográficas
AGUIRRE, GAMIO, Hernando. (1975). «La actitud religiosa en Mariátegui».En: http://repositorio.cultura.gob.pe/handle/CULTURA/122?locale-attribute=en
CASA MUSEO JOSÉ CARLOS MARIÁTEGUI. (2019). «100 Intelectuales Saludan a Mariátegui». En: https://museos.cultura.pe/sites/default/files/flipping_book/boletinjcmenmar2019/files/assets/common/downloads/publication.pdf
Fuente: LIRA, Israel. «Columna de Opinión No. 172 del 20.07.2020». Diario La Verdad. Lima, Perú.
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