La primera fase de reactivación de nuestra economía se encuentra en un 91%, siendo que de acuerdo a un Informe del Grupo Financiero Inandes, tenemos que si bien este programa asegura la cadena de pagos, el rango de beneficio para las microempresas –en esta primera fase al menos– solo alcanzaría a financiar entre el 1.5% al 2%, cuando son estas –junto con las pequeñas empresas– las que tienen influencia en el 85.4% de las fuentes de trabajo en el Perú, siendo las primeras (microempresas) responsables del 71.2% y las segundas (pequeñas empresas) del 14.2%.
Es en estas situaciones cuando vemos claramente que el dogma liberal clásico de que la economía se autorregula no nos sirve de mucho, ya que en determinadas situaciones se necesita de la firme intervención del Estado, para evitar la sobreproducción, la especulación y el quiebre de empresas en sectores estratégicos de la economía de una nación. Siendo que antes de continuar con las atingencias que tenemos al respecto, nos es preciso abordar nuestro marco teórico, en ello, que entendemos por Mypes y por cadena de pagos.
Las Mypes (Micro y Pequeña Empresa) son unidades económicas (que pueden ser personas naturales o jurídicas) para la extracción, transformación, producción, comercialización de bienes o prestación de servicios.
Antes la diferencia entre Micro y Pequeña empresa se establecía tanto por el número de trabajadores como por el monto de venta anual (D.S No. 007-2008-TR), mientras que actualmente solo importa el monto de venta anual. Siendo que si dicho monto se encuentra en un rango de hasta 150 UIT, se clasifica como micro-empresa, mientras que si va desde 150 hasta 1700 UIT se cataloga como pequeña-empresa (Ley No. 30056).
Dicho esto, es de recordar que la microeconomía (análisis de la demanda, la oferta y su interacción en el mercado) sienta sus bases en dos teorías, la teoría del consumidor y la teoría de la empresa; entre consumidores y empresas hay una dinámica que genera el llamado circuito económico: «Las personas proveen servicios y las empresas utilizan este servicio para producir bienes y servicios que son dirigidos a empresas para satisfacer su necesidad. Hay un circuito económico que se mantiene gracias a los pagos que realizan mutuamente estos agentes» (Ramírez, RPP, 01.04.2020). Así la cadena de pagos puede ser definida como «la transmisión de gastos de uno, que son ingresos de otro», es decir: «Si soy una empresa que no puedo pagar salarios, porque se caen mis ventas, entonces estos trabajadores tampoco pueden cubrir sus gastos ni pagar sus créditos, por ejemplo. Esta empresa tampoco paga a sus proveedores y a los bancos y, estos, a su vez, incumplen. Los trabajadores a su vez no pueden cubrir sus gastos de la casa y comienzan a incumplir con sus acreedores, sus deudas, tarjetas de crédito, hipotecas, no pueden pagar el colegio de sus hijos. A su vez incumple con proveedores que, como no reciben pagos, no pueden pagar a sus trabajadores y gastos y así se arma toda esta cadena» (Segura, RPP, 01.04.2020).
Visto lo expuesto, el programa Reactiva Perú se configura así en un salvavidas del Estado peruano para rescatar la economía nacional. Muchos que tienen el trauma del intervencionismo ya sea por experiencia o por dogmática liberal, se muestran ciertamente sorprendidos. Aldo Bertello, economista y Jefe de relaciones corporativas del Centro de Emprendimiento e Innovación de la Universidad del Pacifico, en esa línea nos dice lo siguiente: «Increíble pero cierto. En esta época difícil por las que vienen atravesando la mayoría de nuestras empresas, la ayuda del Estado resulta imprescindible para evitar la quiebra masiva de muchos de los pequeños negocios de nuestro país, sobre todo los más endeudados. Siempre hemos rechazado la intervención del Estado en nuestra sociedad. Lo hemos querido minimizar en todos los aspectos de nuestras vidas. Siempre lo hemos visto como al enemigo. Pero resulta que la crisis económica por la que venimos atravesando es de tal magnitud que necesitamos que el Estado nos rescate, para no cerrar las puertas de nuestros negocios. ¡Insólito!» (Gestión, 07.05.2020).
Lo que a Bertello le parece insólito, es la fórmula de las potencias emergentes al día de hoy (p.e Rusia, China, etc), que han sabido equilibrar libertad económica con justicia social, es decir, han sabido reconocer que la intervención desmedida es nociva, pero aplicada de forma estratégica puede ser beneficiosa.
Comentarios en esta primera fase de reactivación, a lo ya mencionado en torno a las Mypes, se aúna lo relativo a los créditos bancarios, que sin perjuicio de lo que pudiera pensarse por el contexto, ciertamente están en un momento favorable: ¿Por qué? El programa Reactiva Perú está respaldando el 98% de todos los prestamos hasta S/. 30,000. Los bancos con ello se ven obligados a ampliar sus carteras, ya que clientes que anteriormente no entraban en un perfil de calificación positivo, ahora lo están, ya que tienen el respaldo del Estado. Las Mypes generalmente obtienen financiamiento de cajas rurales, cajas municipales, financieras y las Edpyme, por lo que también se verán beneficiadas con estos respaldos. También las grandes empresas tienen un respaldo en sus préstamos de hasta S/. 10 millones en un 80%.
Antes del programa, la situación de los Bancos era delicada, y lo sigue siendo al día de hoy, sin perjuicio de ello, el programa ciertamente brinda a las entidades bancarias un cierto respiro, ya que si antes era difícil la elección de clientes potenciales en tanto no se tenía la certeza de que se estuviera otorgando un crédito a alguien que tuviera liquidez, es decir, que pudiera pagar, ahora ya se cuenta con la seguridad del caso, siendo que el deber de los Bancos ahora es el de cobrar tasas de interés más bajas: «Para esto los bancos tendrán que cambiar su chip a la hora de evaluar a sus clientes potenciales, ya que tradicionalmente los han venido rechazando. Esta coyuntura los pone a prueba. Tienen una gran oportunidad y al mismo tiempo una gran responsabilidad social: Deben hacer lo correcto y apoyar esta importante reactivación tan necesaria y esperada por todos…. ¿Entonces serán capaces los bancos de apoyar a las pequeñas empresas, abrirle sus puertas..? Ojalá sea así. Por el bien de todos, nunca tendrán mejores condiciones que estas. Es hora de ponerlos a prueba» (Bertello, Gestión, 07.05.2020).
Finalmente, nosotros no compartimos el entusiasmo de Bertello en la buena fe de los Bancos, que al menos sí los directivos de dichas entidades tuvieran un accionar sustentado en un enfoque, ya bien sea en la Doctrina Social de la Iglesia o en la Economía Social de Mercado, siendo esta última inspirada en la primera, pudiera darse tal beneficio de la duda, sin embargo, como ese no el caso y los Bancos generalmente tiene una racionalidad económica muy clásica (principio de máxima ganancia), lo que pase ahora en adelante respecto de lo mencionado, no ameritará ninguna sorpresa si es que las entidades bancarias no toman en cuenta las exhortaciones de Bertello. Estas y muchas otras consideraciones, reafirman el papel clave del Estado en la orientación estratégica de la economía nacional.
Referencias Bibliográficas
GESTIÓN. (07.05.2020). En: https://gestion.pe/opinion/el-estado-nuestro-mejor-socio-noticia/?ref=gesr
GESTIÓN. (28.05.2020). En: https://gestion.pe/economia/reactiva-peru-primera-fase-no-financiaria-mas-del-2-de-las-microempresas-noticia/?ref=gesr
RPP. (01.04.2020). En: https://rpp.pe/politica/gobierno/coronavirus-en-peru-covid-19-que-es-la-cadena-de-pagos-y-que-se-ha-hecho-para-evitar-que-se-rompa-en-este-contexto-de-cuarentena-noticia-1255721?ref=rpp
Fuente: LIRA, Israel. «Columna de Opinión No. 159 del 01.06.2020». Diario La Verdad. Lima, Perú.
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